México-Estados Unidos: ¿el que paga manda?

Tres días antes de la recaptura de Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, el Congressional Research Service (el Servicio de Investigación del Congreso estadunidense) emitió un duro informe acerca de la Iniciativa Mérida.

El Chapo, ¿misión cumplida?

¿A qué salió Joaquín Guzmán Loera, el Chapo, de la prisión de máxima seguridad hace 6 meses? ¿A reunirse con artistas que viven en Estados Unidos y darles información de sus actividades y, acaso, sus relaciones políticas? Eso mismo se habrán preguntado en las altas esferas del gobierno mexicano. Así que fueron por él y lo regresaron al Centro Federal de Readaptación Social 1, El Altiplano.

Hacia un Estado policiaco

Los constituyentes de 1917 querían que la sociedad mexicana no volviera a padecer un régimen policiaco como el de Santa Anna o Porfirio Díaz. Lejos se quedaron de realmente evitarlo (como lejos se quedaron en muchos otros de sus ideales). Con todo, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos sí recogió varias de las demandas de justicia social. Y desde Manuel Ávila Camacho hasta Peña Nieto los sucesivos gobiernos sexenales han venido desmontando todo ese entramado jurídico que, al menos en el papel, promovía las garantías individuales, las propiedades colectivas y nacionales y el acceso universal a los derechos básicos: salud, educación, vivienda y trabajo. Hoy todo se ha dejado al mercado y libre comercio. Ahora no son derechos sino, simple y cínicamente, negocios. Y pues que cada quien tenga la salud, por ejemplo, que se pueda comprar.

La maniobra de los comisionados del Inai

Millones de mexicanos no recibirán aguinaldo y pasarán sus fiestas navideñas sin cenas especiales ni, mucho menos, intercambios de regalos. Otros, incluso, pasarán el 25 de diciembre y recibirán el nuevo año tras las rejas, por haberse opuesto a algunas de las “reformas estructurales” que impuso el régimen.