Voto maduro

El amor (y la familia) en los tiempos de la clandestinidad

El guerrillero que pasa a la clandestinidad deja una familia… Y comienza la construcción de otra: la familia revolucionaria
Tercera pinta: instrucciones para ingresar a la guerrilla

El adolescente Jacobo Silva Nogales buscaba incorporarse a la lucha armada. Creía que con eso bastaba para, algún día, pertenecer a una de las organizaciones político-militares. Lo cierto es que la guerrilla ya lo había escogido y sin advertirlo había iniciado con él un proceso de formación teórica, política y de acondicionamiento físico. El Partido de los Pobres había visto en él la oportunidad de reactivar su movimiento
Contralínea 330

Consulta todos los textos de Contralínea 330, abril 2013